Para llegar hasta las albercas habia que hacer un paseo por la carretera desterra que veis mas arriba de casi una hora. Entre eso y los muchos juegos a los que jugamos y que nadie dormia siesta a eso de las 21 empezaba el desfile de los niños que PEDIAN a sus padres irse a la cama. Los padres de Marcello y Julieta aun no pueden creerse que durante tres dias simplemente tuvieron que acompañar a sus zagalones al cuarto y darles un beso de buenas noches. Que lujo!!! Eso si, a las 830 de la mañana hemos tocao corneta to los dias. O es que se piensan que nos van a dejar sin desayunar a nosotros!!!
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